Jugando a cosicas (XLVIII). Reseña de Tzolk’in.

Hola a todos, después del parón navideño volvemos a la carga con reseñas. Hoy voy a hablaros de un juego que me causó muy buena impresión el año pasado cuando lo conocí y al que últimamente le estoy dando bastante caña por internet.

Tzolk’in, the mayan calendar: Puntuación (8)

Bajo este enrevesado nombre se esconde un juego de colocación de trabajadores, un estruja-sesos de lo más completo con un montón de acciones que realizar. Somos los líderes de una tribu maya, y recolectaremos recursos, construiremos edificios y haremos ofrendas a los dioses, con el fin de ser la mejor tribu.

El tablero es de estos llenos de cosas que la primera vez que los ves dices – madre mía – pero tampoco hay que asustarse, una vez entras al trapo ves que lleva cuatro zonas básicas; las ruedas donde colocas los trabajadores (luego hablaré de las ruedas que son la gracia del juego), la tabla de tecnologías con mejoras en las acciones de las ruedas, la zona de los dioses que te dan puntos y algunos recursos y la zona de edificios disponibles que te ofrecen una gran variedad de ventajas, tales como trabajadores extra, comida o puntos de victoria directos.

La primera vez que ves tanta casilla junta es normal entrar en pánico (foto BGG).

Por supuesto, como en todos estos juegos, todas las zonas, acciones y demás están conectadas de algún modo, con los recursos compras edificios, que te dan ventajas para coger más recursos o que te permiten subir el favor de los dioses que te da puntos y recursos con los que… Aquí es donde entra el AP en acción, especialmente en los últimos turnos, porque solo por hacer las acciones en el orden equivocado te puedes perder un buen combo y en este juego los errores se pagan.

Elegir las acciones correctas, en el momento adecuado no es fácil (foto BGG).

Como decía, lo original de este juego son las dichosas ruedas. La zona de colocación de trabajadores está formada por unas ruedas dentadas interconectadas y estas van avanzando cada turno llevando con ellas a los trabajadores por delante de las acciones disponibles. Cuanto más tiempo dejas un trabajador en una rueda más lejos avanza y obviamente accede a acciones más potentes.

Pero eso no es todo, para complicar más la cosa cada turno debes elegir entre colocar trabajadores en las ruedas o retirar trabajadores de las ruedas para que lleven a cabo las acciones sobre las que están.

Las famosas ruedas (foto BGG).

Así que la clave es saber colocar los trabajadores en el momento y lugar correctos para poder retirarlos cuando nos interesa, es una combinación exquisita de paciencia y conteo de turnos. No es bueno quedarse con todos los trabajadores en la mano porque el coste de colocarlos es exponencial y agotaremos nuestras reservas rápidamente si colocamos muchos trabajadores de vez, pero tampoco quedarse sin ninguno, puesto que en ese caso deberemos retirar un trabajador de las ruedas (recordad que cada turno debes poner trabajadores o retirar trabajadores), quizás demasiado pronto para nuestros planes.

El otro día, hablando de estrategias de victoria, comentaba el tema de las sinergias. Este juego es un ejemplo de manual. Existe un tipo especial de edificio, los monumentos, que otorgan una buena cantidad de puntos al final de la partida en función de cuanto hayamos progresado en aspectos variados del juego, como marcadores de comida acumulados, edificios de un color (tipo) concreto, tecnologías conseguidas, etc… no creo que haga falta explicar más, si hay un par de monumentos que premian tener los marcadores de favor divino altos, pues toca centrarse en esa parte del juego y conseguir que cada punto obtenido en los templos me valga como dos o tres.

Los monumentos verdes (fila superior) dan puntos por avances tecnológicos y hay un montón de edificios (fila inferior) para subir tecnologías, parece un buen objetivo para esta partida… (foto BGG).

El juego es además muy bonito, con mucha madera, un cartón excelente y uno componentes de calidad y bien diseñados. Así que la única pega que le puedo poner a este juegazo es que como te toque un jugador lento te vas a pasar la tarde suspirando.

Que pese, es lo que quiero cuando compro un juego (foto BGG).

Por último, anotar que es uno de los títulos que puede jugarse en la web de Boardgame Arena, lo que te permite echarte unas partidas online estupendas y quitarte ese mono de juegos densos que nos da de vez en cuando a los jugones.

Te gustará si te gustan los sesudos con muchas opciones y estrategias disponibles y un buen grado de interacción como el Dominant Species o el Bora Bora y con la ventaja añadida de que este es un juego mucho más corto (aunque con lo intenso que se hace, cuando terminas te da la sensación de que llevas jugando tres días).

STATS
COMPLEJIDAD: 7, nada de novatos, esto ya es para los mayores.
DIVERSIÓN: 8, magnífico, sin más.
FRIKEZ: 7, como ocurre muchas veces, no porque el tema sea raro, sino porque las mecánicas complejas no son para todos los públicos.
Links a Tzolk’in the mayan calendar en Board Game Geek y Mesa de Juegos.
Nos vemos la semana que viene con más cosas frikis, y como siempre recordad que podéis seguir el blog en facebookGoogle+ y twitter en 2maracasD10.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

  1. Magnífica reseña, como siempre! A mi es un juego que me gusta una barbaridad, y siempre lo tengo en el punto de mira, aunque aun no ha entrado en mi ludoteca (todo se andará).

    Sin duda, como comentas, el aspecto mas interesante de este título respecto a otros es la gestión del tiempo y sobre todo, intentar tener controlados a tus rivales, pues trabajador de ellos puestos en el momento menos oportuno pueden destronzarnos!

  2. ¿El dios marrón es un playmobil o me lo parece? (penúltima foto). Cuando quieras volvemos a jugar (pero este juego lo prefiero a 2 jugadores, por lo menos en la bga)

  3. Un juego al que le tengo ganas y que deberían de haberme traido los Reyes… Te has traido una foto de la BGG y si mal no recuerdo allí también hay unas de alguien que pintó las ruedas y que te hace pensar que cómo no lo tienes en casa… y así pintado… :DDD.